El sistema impositivo actual, aplicado a tantos millones de personas tiene paradójicamente resultados complejos y complicados.
Si miramos a lo largo de la historia, en la época feudal los impuestos siempre han tenido una aplicación y resultados complejos.
Aquellos que hablan de los impuestos con una simplicidad increible y una bondad increible y veneración de los sistemas actuales, me pregunto si su motivación real y su interés real es tan bueno y noble como dicen.
Las funciones de los impuestos es recaudar recursos para mejorar el bienestar general y para mejorar el bienestar de los que están peor.
La paradoja actual a mi modo de ver, y se que mucha gente no lo percibe así es que los altos niveles de imposición a los trabajadores y pequeños empresarios o autónomos es una fuenta de continua explotación y creación de pobreza.
Las causas de esa realidad son múltiples y habría que analizarlas detalladamente.
Lo que no veo lógico es que la gente no pueda ganarse el pan de hoy y si lo hace tenga que tributar aproximadamente el 50 por ciento de lo que gana.
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